¿Cómo ducharse durante la menstruación?

La menstruación es una parte natural de la vida, pero a veces puede resultar un poco incómoda en lo que respecta a la higiene personal. Ya sea que tengas cólicos, hinchazón o simplemente estés lidiando con los aspectos prácticos de gestionar tu flujo menstrual, ducharte durante la regla no tiene por qué ser estresante. Con el enfoque adecuado, puedes sentirte limpia, fresca y segura.

Aquí tienes una guía para ducharte durante la menstruación, con consejos para tu comodidad, higiene y tranquilidad.

1. Usa el producto menstrual adecuado

Antes de ducharte, lo más importante es saber cómo se comportará tu producto menstrual durante la limpieza. Ya uses compresas, tampones, copas menstruales o ropa interior menstrual, es fundamental tener en cuenta tu flujo.

Copas menstruales:

  • Las copas menstruales son una excelente opción para la ducha porque recogen el flujo menstrual internamente, por lo que no tienes que preocuparte por las fugas durante un enjuague rápido.

  • Puedes usar la copa menstrual mientras te duchas sin problema, pero asegúrate de colocarla correctamente antes de empezar para evitar fugas. Después, si quieres mayor comodidad, puedes vaciarla.

Tampones:

  • Si prefieres usar tampones , puedes ducharte con ellos puestos. Sin embargo, debes tener cuidado con su capacidad de absorción. A veces, los tampones pueden resultar incómodos cuando están mojados, así que asegúrate de que esté bien colocado antes de entrar en la ducha.

  • Ten en cuenta cuánto tiempo llevas puesto el tampón. Se recomienda cambiarlo cada 4-6 horas para evitar irritaciones o infecciones.

Compresas y ropa interior menstrual:

  • Las compresas y la ropa interior menstrual no suelen ser ideales para ducharse, ya que pueden moverse o empaparse. Si usas compresas, lo mejor es quitártelas antes de ducharte.

  • Si usas ropa interior menstrual, suele ser buena idea cambiártela antes de ducharte para evitar fugas, especialmente si tu flujo es abundante.

2. Dúchate en el momento adecuado

El momento de ducharte durante tu periodo puede influir en tu comodidad. A muchas personas les resulta más fácil ducharse por la mañana o por la noche, cuando el flujo es menor. Esto puede ayudar a reducir la preocupación por las fugas o las molestias durante la ducha.

  • Durante el día: Si necesitas ducharte a mediodía, intenta hacerlo después de cambiarte el producto menstrual para asegurarte de estar limpia y seca.

  • Por la noche: Ducharse antes de acostarse es otra excelente opción, ya que el flujo suele ser más ligero por la noche. Esto también te da la oportunidad de refrescarte y dormir bien sin preocuparte por las pérdidas de orina.

3. Mantén la temperatura del agua bajo control.

Las duchas calientes pueden resultar relajantes, sobre todo si tienes cólicos, pero ten cuidado con la temperatura del agua. El agua muy caliente puede aumentar el flujo sanguíneo, lo que podría provocar hinchazón o incomodidad.

  • El agua tibia es la mejor opción para ducharse durante la menstruación. Es suave para el cuerpo y ayuda a relajar la tensión muscular, especialmente en la parte baja del abdomen, donde puedes sentir cólicos.

  • Evita las duchas muy frías, ya que pueden causar molestias y es posible que no ayuden con la hinchazón o los calambres.

4. Utilice productos suaves y sin perfume.

Cuando se trata de productos como gel de ducha, jabón o geles de higiene femenina, es fundamental elegir aquellos que sean suaves para la piel, especialmente en la zona vaginal.

  • Evita usar jabones o geles de ducha perfumados en la zona vaginal, ya que pueden alterar el equilibrio natural de la flora bacteriana y causar irritación o infección. Opta por productos sin perfume o aptos para pieles sensibles .

  • El agua tibia suele ser suficiente para limpiar la zona genital externa. No es necesario usar ningún jabón íntimo especial a menos que lo recomiende su médico.

5. Limpieza de la zona vaginal

Durante la menstruación, es importante centrarse en una buena higiene, pero también respetar el equilibrio natural de la flora vaginal.

  • Lavado externo únicamente: Recuerda siempre limpiar la parte exterior de tu vagina (la vulva) con agua y jabón suave sin perfume. Evita las duchas vaginales o la introducción de cualquier objeto en la vagina, a menos que te lo indique un médico, ya que puede provocar infecciones.

  • Seca dando palmaditas: Después de la ducha, usa una toalla suave para secar la zona con palmaditas suaves . Evita frotar la piel, ya que esto puede causar irritación, especialmente si estás más sensible durante la menstruación.

6. Cómo controlar los cólicos durante la ducha

Si sufres de cólicos menstruales, tomar una ducha tibia puede proporcionarte un alivio significativo. Aquí te explicamos cómo puedes hacerla más efectiva:

  • Compresa tibia: Usa el agua tibia de la ducha para relajar los músculos abdominales. Deja que el agua caiga sobre la parte baja del abdomen durante 5 a 10 minutos. Esto puede ayudar a reducir los cólicos y aliviar cualquier molestia.

  • Masaje: Masajea suavemente tu abdomen mientras te duchas para aliviar la tensión y estimular la circulación. Es una forma natural y eficaz de aliviar el dolor abdominal.

7. Después de la ducha: Refréscate con un cambio de producto menstrual.

Después de ducharte, querrás asegurarte de que te sientes cómoda y de que tu producto menstrual sigue en su sitio y funcionando eficazmente.

  • Si es necesario, cambia tu producto (tampón, compresa o copa menstrual) después de ducharte para asegurarte de estar seca y fresca.

  • Si usas una copa menstrual, es recomendable vaciarla y enjuagarla después de la ducha para evitar fugas durante el día.

8. Consejos para la ducha para controlar los días de flujo abundante

Si sueles tener un sangrado abundante en ciertos días de tu menstruación, considera estos pasos adicionales:

  • Dúchate con más frecuencia: Si tu flujo es abundante, conviene ducharte más a menudo para mantenerte fresca y evitar posibles fugas. Esto es especialmente importante si usas compresas, ya que pueden absorber la humedad durante la ducha.

  • Ten a mano repuestos: Mantén tampones, compresas o ropa interior menstrual adicionales cerca, para que puedas cambiarte rápidamente después de la ducha y mantenerte protegida.

Conclusión

Ducharse durante la menstruación no tiene por qué ser complicado. Con la preparación, los productos y el momento adecuados, puedes mantenerte limpia y cómoda, a la vez que controlas tu flujo menstrual. Ya sea que uses una copa menstrual, tampones o ropa interior menstrual, se trata de elegir lo que mejor se adapte a tu flujo y sentirte segura de ti misma.

Recuerda cuidar tu higiene, mantener tus productos frescos y usar un limpiador suave para evitar irritaciones. Con estos sencillos consejos, te sentirás fresca y limpia, sin importar el día de tu ciclo.

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